martes, 27 de septiembre de 2016

Sucubos e incubos




              Sucubos e incubos



                            Demonios súcubos
                            
                         Súcubo, de Selenada       

  Estos demonios poseen siempre el aspecto de una mujer de belleza extraordinaria, piel perfecta y cabello oscuro o rojizo. Posiblemente, el mismo aspecto de Lilith, Reina de la Oscuridad y la Noche, de quien se cree que descienden todos los demás súcubos.
  Se esconden tras esta atractiva fachada para conseguir atraer y tentar a los mortales que se cruzan en su camino. Su única misión es atraer primero para atormentar después.
Sus movimientos son ágiles y precisos. Su forma de caminar es muy seductora y cuentan con una gran presencia y carisma. Ese tipo de carisma que fascina y casi deja hipnotizado a su interlocutor, aunque un espectador avispado podría saber que se trata de un demonio por ese destello en su mirada de oscuro y enfermizo deseo.
Hablan varios idiomas, por lo que no tienen problemas para entablar conversaciones y establecer nuevas relaciones sociales. Podrían considerarse la compañía ideal si no fuese porque, en ocasiones, se dejan llevar y sacan su lado más lascivo.
  Los demonios súcubos no necesitan mostrarse agresivos y, además, rehúyen los conflictos. Prefieren usar su capacidad de persuasión y don de gentes para conseguir sus propósitos. Además, en caso de necesidad, no dudarán en adoptar el papel de víctima o de damisela en apuros. Incluso pueden enredar y poner a unos en contra de otros por simple diversión.
Una vez tienen elegido al mortal procuran alejarse con él de la multitud, y entonces usan su capacidad de sugestión, muy parecida a la de los vampiros, para hacerle creer prácticamente cualquier cosa que deseen. Cuando la víctima entra en ese estado hipnótico pasa a ser atacada por el súcubo, que consume la energía de la víctima mientras mantienen relaciones sexuales.
Estos demonios se nutren de la energía vital del mortal, energía que también les permite mantener ese aspecto joven y encantador.
Tras el estado de inconsciencia, las víctimas pasan a un sueño profundo del que suelen despertar agotadas, deprimidas y con la sensación de haber vivido una horrible pesadilla, aunque si el súcubo se excede extrayendo energía es posible que no consigan despertar y acaben muriendo.
Algo que divierte mucho a estos demonios súcubos es atacar a hombres virtuosos o que han hecho voto de castidad. Les encanta atormentarlos al despertar del sueño con recuerdos de orgías y perversiones que los hacen sentir muy avergonzados.
     Aunque no es habitual, en ciertas ocasiones los súcubos muestran su verdadero aspecto mientras mantienen relaciones con sus víctimas. Los ojos de serpiente, los colmillos, las alas de murciélago y la cola son un “extra” de martirio del que disfrutan cuando su víctima no les gusta especialmente.

                                          Demonios íncubos  

                                    Resultado de imagen para demonios incubos

El demonio íncubo es la contrapartida masculina del súcubo. Un hombre joven, muy atractivo y fuerte que seduce y atrae generalmente a mujeres, a las que atormenta de la misma manera que suelen hacerlo los súcubos.
Existe la teoría de que estos demonios son descendientes de ángeles caídos que han degenerado en succionadores energéticos. Aunque también se dice que, en realidad, los íncubos y los súcubos son el mismo tipo de demonio, que adopta la forma de hombre o mujer según los gustos de su víctima.
Suelen acercarse a todo tipo de mujeres; mayores o jóvenes, casadas, solteras o viudas, aunque comparten con los súcubos su debilidad por las mujeres religiosas y de férrea moral, sobre todo las novicias. Disfrutan sabiendo el dolor y la vergüenza que causarán a sus víctimas al despertar de su espantoso sueño.
Muchas de estas mujeres pueden incluso quedar embarazadas. Cuando esto ocurre existe la posibilidad de que el bebé nacido sea un engendro a disposición de las fuerzas del mal, o un poderoso humano mágico que se decline por hacer el bien. Un ejemplo de este último caso es el del mago Merlín, de quien se cuenta que nació de la oscura seducción de un íncubo a una monja.  

                               Encantamientos de cama

Los súcubos e íncubos tienen la capacidad de realizar un encantamiento al lugar donde se produce el ataque sexual, generalmente, la cama de la víctima, de manera que cada vez que ésta descansa sobre dicha cama se drena parte de su energía, que pasa directamente al demonio aunque esté lejos del lugar.
Este poderoso hechizo puede acabar con la vida del mortal mientras que hace más fuerte al demonio. Así, cuantas más víctimas consiga, más poderoso se vuelve.

                                              











  



   

lunes, 26 de septiembre de 2016

Significado de Dharma

                Significado de Dharma



                            Resultado de imagen para el dharma tiene el poder de balancear y borrar el mal( el karma)
 

Qué es Dharma:


La palabra dharma, también escrita como darma, es de origen sánscrito que significa “ley” o “realidad”. El dharma, es un término que se utiliza en diversas religiones, especialmente de origen védico, como: budismo, hinduismo, jainismo, y sijismo, adoptado posteriormente en el espiritismo.
El ser humano puede escoger como y de qué manera quiere sufrir las consecuencias por sus acciones, en este momento es donde entra el dharma que caracteriza la naturaleza interior del ser humano y reconoce que existe una Ley Divina y unos principios morales que deben de ser reconocidos y obedecidos para lograr el camino de la perfección y la felicidad en este mundo, y en el próximo.
El individuo que practica el dharma se caracteriza por hacer el bien al prójimo, desenvolver la felicidad y la fraternidad universal, así como desarrollar una conducta, pensamientos y otras prácticas mentales que elevan el carácter de un Ser, que lo lleva a obtener prosperidad, felicidad eterna y la cesación total de dolor.
Por su parte, la palabra adharma es todo aquello que provoca discordia, separación, y fomenta odio. En conclusión, la palabra adharma es todo lo contrario a dharma. 

Dharma y Karma


Toda acción viene acompañada de una reacción, tomando en cuenta este principio se concluye que si un individuo se comporta de acuerdo a su religión y principios morales, su consecuencia será positiva, y es por ello que puede recibir una recompensa en el presente, esto es lo que se conoce como dharma.
Por su parte, si las reacciones de una acción realizada por el individuo son negativas estamos en presencia del karma, y pagara por ello tarde o temprano.